10 hemos procurado enviaros embajadores para renovar la fraternidad
y la amistad con vosotros y evitar que vengamos a seros extraños, pues ha
pasado mucho tiempo ya desde que nos enviasteis vuestra embajada.
11 Por nuestra parte, en las fiestas y demás días señalados, os
recordamos sin cesar en toda ocasión en los sacrificios que ofrecemos y en
nuestras oraciones, como es justo y conveniente acordarse de los hermanos.
12 Nos alegramos de vuestra gloria.
13 A nosotros, en cambio, nos han rodeado muchas tribulaciones y
guerras, pues nos hemos visto atacados por los reyes vecinos.
14 Pero en estas luchas no hemos querido molestaros a vosotros ni a
los demás aliados y amigos nuestros,
15 porque contamos con el auxilio del Cielo que, viniendo en nuestra
ayuda, nos ha librado de nuestros enemigos y a ellos los ha humillado.
16 Hemos, pues, elegido a Numenio, hijo de Antíoco, y a Antípatro,
hijo de Jasón, y les hemos enviado a los romanos para renovar la amistad y
la alianza que antes teníamos,
17 y les hemos dado orden de pasar también donde vosotros para
saludaros y entregaros nuestra carta sobre la renovación de nuestra
fraternidad.
18 Y ahora haréis bien en contestarnos a esto.»
19 Esta es la copia de la carta enviada a Onías:
20 «Areios, rey de los espartanos, saluda a Onías, sumo sacerdote.
21 Se ha encontrado un documento relativo a espartanos y judíos de
que son hermanos y que son de la raza de Abraham.
22 Y ahora que estamos enterados de esto, haréis bien escribiéndonos
sobre vuestro bienestar.
23 Nosotros por nuestra parte os escribimos: Vuestro ganado y
vuestros bienes son nuestros, y los nuestros vuestros son. Damos orden de
que se os envíe un mensaje en tal sentido.»
24 Tuvo noticia Jonatán de que los generales de Demetrio habían
vuelto con fuerzas mayores que antes con ánimo de atacarle.
25 Partió, pues, de Jerusalén y fue a encontrarles a la región de Jamat,
sin darles tiempo a irrumpir en su país.
26 Envió exploradores al campamento enemigo y supo por ellos, a su
vuelta, que los enemigos estaban dispuestos para caer sobre ellos a
la
noche.
27 Cuando se puso el sol, ordenó Jonatán a los suyos que se
mantuviesen despiertos y sobre las armas toda la noche, preparados
para
entrar en combate, y dispuso avanzadillas alrededor del campamento.
28 Cuando supieron los enemigos que Jonatán y los suyos estaban
preparados para el combate, sintieron miedo y, llenos de
pánico,
encendieron fogatas por su campamento y se retiraron.